En Induvance no nos gusta perder el tiempo con equipos mediocres. Por eso, cuando hablamos de visión artificial e identificación industrial, trabajamos con Cognex. No es “una marca más”, es el estándar mundial. Sus lectores de códigos y sistemas de inspección están diseñados para ambientes duros: líneas rápidas, polvo, humedad, vibraciones… y aún así, siguen funcionando.
Con Cognex puedes leer códigos imposibles, inspeccionar piezas con precisión milimétrica y detectar defectos antes de que se conviertan en un problema caro. Es tecnología hecha para plantas que no se pueden detener.
¿Dónde entra Induvance? Nosotros te ayudamos a que esto funcione. Instalamos, integramos y damos soporte para que los equipos Cognex trabajen codo a codo con tu infraestructura IT. Así, tú solo te enfocas en producir. Lo demás, lo resolvemos nosotros.
Los lectores fijos Cognex están diseñados para una sola cosa: leer sin fallar. Capturan códigos dañados, sucios o mal impresos, incluso en movimiento y bajo presión. Si tu trazabilidad depende de que algo se lea bien a la primera, estos lectores no perdonan.
Los lectores de mano Cognex aguantan lo que sea. Golpes, caídas, grasa, polvo. Y aún así leen códigos que otros ya habrían tirado a la basura. Si tus operadores están en piso, necesitas algo que no se rompa y que siempre funcione. Esto es eso.
Los sensores de visión Cognex ven lo que otros no pueden. Detectan fallos, miden piezas y verifican calidad con precisión de acero. Funcionan en ambientes industriales donde nada es fácil: polvo, vibraciones y altas velocidades. Si quieres evitar errores costosos, estos sensores son tu mejor apuesta.
Son la fuerza imparable en tu línea de producción. Robustas, precisas y sin descanso. No fallan aunque el código esté borroso, sucio o dañado. Se montan firmes, leen rápido y sin error, sin pedir permiso ni excusas. Si quieres resultados sin cháchara, esto es para ti.
Para leer códigos en movimiento, bajo polvo, golpes o vibraciones. En líneas de producción, almacenes, transporte, cualquier lugar donde se juegue en serio. Donde otros equipos fallan, estos siguen leyendo y asegurando tu trazabilidad.
Son tus compañeros inseparables en el piso de planta. Resistentes a golpes, caídas y cualquier desastre que les tires. No son simples lectores: son máquinas diseñadas para seguirte el ritmo cuando estás en movimiento, sin quejarse ni pedir descanso.
Se usan donde necesitas movilidad real: en bodegas, almacenes, fábricas, transportes, y cualquier lugar donde no puedas atarte a un lector fijo. Funcionan en ambientes difíciles, con polvo, humedad o grasa, porque sabemos que ahí se juega duro.
Son los ojos que nunca parpadean de tu planta. Pequeños pero letales, capaces de detectar hasta el más mínimo error que tus ojos podrían pasar por alto. No se cansan ni se distraen; trabajan en silencio mientras tú te preocupas por otras cosas.
Se usan para inspección, control de calidad y guía en líneas de producción. Están en todas partes: desde manufactura, farmacéutica, electrónica, hasta alimentos. Donde hay que ver bien, rápido y sin fallas, ahí están ellos, vigilando todo al detalle.
Porque no se trata solo de venderte un lector o un sensor.
Se trata de que funcione en tu planta, con tus procesos, en tu realidad. Y de eso, nos hacemos cargo nosotros.
Cuando compras Cognex con Induvance, no te soltamos la caja con un "suerte con eso".
Nos metemos de lleno en tu operación y no paramos hasta que todo esté leyendo, detectando o inspeccionando como debe.
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Mandanos un email a: administracion@induvancecom
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